El retorno de la moneda, cuyo nombre rinde tributo a uno de los propulsores de la tragedia social del continente.

Si volverá a circular el colón en el caso de que triunfe no la izquierda, sino el FMLN, es uno de los temas a los que más líneas han dedicado analistas de diversas tendencias durante varios años. Hay que recordar que éste no es un tema de campaña, sino, un tema que ha generado interés desde antes que el dólar se convirtiese en la única moneda en circulación. Sin ánimo de defender líneas editoriales, y sin pretender justificar las inquietudes de los salvadoreños, es necesario tomar en cuenta, que la moneda la utilizamos todos; y es por eso, que preguntar sobre si regresara o no el colón, debe estar en la agenda de cualquier medio, y contestar a las interrogantes en torno a esta inquietud, es el deber de todos aquellos que pretenden gobernar este país, y particularmente, es obligación de quienes han manifestado intenciones de hacer cambios en este rubro, como también es necesario que lo haga el candidato al Ejecutivo por ser la figura pública del proyecto de nación que éstos están promoviendo.

Las declaraciones que Mauricio Funes ha dado sobre la continuidad de la dolarización, y las declaraciones vertidas por las figuras más notables del FMLN en lo que respecta al mismo tema, no pueden ni deben pasarse por alto, pues una de las propuestas del Frente que más expectativas ha producido en los últimos años, es el retorno del colón, y se debe tener claridad sobre si este tema aún lo tienen en agenda; sin obviar, que desde el Ejecutivo no podrían hacer mucho sin contar con el apoyo de la Asamblea.

Se puede pensar que estamos presenciando la máxima evidencia de las contradicciones existentes entre Funes y la fracción dura del FMLN, pero no lo creo así, y no porque no tengan diferencias entre los criterios de cómo gobernar o de cómo hacer campaña, sino, por que la historia del instituto político y la trayectoria del periodista nos sugieren que así como hay muchos puntos comunes, también hay bastantes en los que no existe convergencia. De no existir antagonismos en torno a la política monetaria, es posible, que el FMLN esté temeroso de las reacciones que tendrán sus militantes y simpatizantes por los cambios o renovaciones que han experimentado y que han ocultado; ó quizás, Funes está intentando evitar que el sector empresarial se asuste ante las intenciones de sacar el dólar de circulación, intenciones que con anterioridad-y al menos- en el discurso han evidenciado la mayoría de los dirigentes del Frente, pero que en la práctica, han sido defendidas con más rigor por sectores no pertenecientes a la izquierda parlamentaria.

El fantasma del Sur.

He escuchado y leído tantas veces, que la fracción del Frente afiliada ideológicamente al Socialismo del Siglo XXI, es la que está a favor del regreso del colón, y que ésta es la que tiene el control del FMLN, y que por lo tanto, al final pesará el criterio de ésta por encima del que tiene el candidato. Pero, hay algo que han pasado por alto quienes se han basado en este tipo de argumentos, y es la experiencia en el proceso que actualmente se vive en Ecuador, donde el presidente Correa nada ha hecho por abolir la dolarización, a pesar de estar estrechamente ligado al Socialismo del Siglo XXI; por lo tanto, sostener que estos vínculos son prueba suficiente para afirmar que el FMLN impondrá el retorno del colón como la derecha impuso la circulación del dólar, es argumentar con sofismos, y también lo es, sostener que por que en Ecuador no se hizo, aquí tampoco se hará. La mayor prueba de que el FMLN no puede hacer que vuelva a circular esta moneda, es que no cuenta con un plan sistemático y sostenible que lo permita, y este instituto político, ya no puede darse el lujo de creer que las ideas triunfan por ser ideas aunque se carezca de planes y condiciones para que éstas sean realizables.